El Tamaño y la Diversidad en un Patronato o Junta Directiva, ¿Importan? Seguro que esta pregunta ha cruzado alguna vez tu cabeza.
¿Cuál es el tamaño óptimo?
¿Qué da mejores resultados, un grupo grande o uno pequeño?
¿Qué aporta la diversidad a la Junta Directiva?
¿Por qué constituir un equipo diverso?
En este post te damos respuestas concretas y propuestas que puedes poner en marcha.
Empecemos por la cuestión del tamaño …
Desde que empezamos a trabajar como consultores, en el 2001, hemos visto todo tipo de tamaños en las juntas y en los patronatos con los que hemos trabajado, ¡van desde 1 persona a 51!
En ocasiones observamos como entra en el Órgano de Gobierno todo aquel con ganas de aportar, y se acaban formando grupos muy numerosos. También hemos conocido Patronatos y Juntas Directivas en las que son pocos miembros y llevan toda la vida perteneciendo a ell@s.
Y, ¿qué da mejores resultados? ¿Un grupo grande o uno pequeño?
En términos generales, las ventajas que tienen los grupos pequeños superan a las que consiguen los grupos más numerosos.
Veamos cuáles son estas ventajas.
Los Órganos de Gobierno más pequeños:
- La gestión del Órgano es más ágil. Por ejemplo, son más fáciles de reunir por una sencilla razón: es más fácil acoplar las agendas de 8 personas que de 20.
¿Cuántas veces has vivido la reiterada posposición de una reunión porque algun@ de l@s participantes no puede acudir?
- Los debates son, por lo general, más breves y están más centrados; eso permite una toma de decisiones más rápida.
- Cuando el grupo es pequeño, es más fácil que se formen vínculos estrechos entre los integrantes.
Los Órganos de Gobierno más grandes:
- Las responsabilidades y el trabajo se pueden repartir más fácilmente y, en principio, la carga individual es menor.
- Es más fácil que coincidan personas que llevan tiempo en la organización y aportan el valor de la experiencia, y gente nueva que puede aportan perspectivas diferentes.
- A mayor número, mayor cantidad de contactos potenciales.
Entonces, ¿hay un tamaño óptimo?
Según un estudio de Bain Capital Private Equity, el número óptimo de miembros de un Patronato o de una Junta Directiva, para que la toma de decisiones sea eficaz, es 7.
Y cada miembro adicional disminuye la eficacia de la toma de decisiones en un 10% 😊
Por lo general, es mejor contar con un número impar aunque se puede usar el voto del presidente, como voto de calidad, en caso de empate.
Glups, estoy lejos del 7, ¿qué hago?
Si quieres cambiar el número de personas que hay en tu Patronato o en tu Junta Directiva, basta con un acuerdo de la misma para modificar ese punto de los estatutos de la entidad.
Un tip: si haces un cambio, puedes poner un rango en vez de un número, lo que os dará margen para cambiar el número de personas sin tener que reformar los estatutos.
Pero, en cualquier caso, antes de modificar los estatutos para acotar el tamaño de la Junta, te recomendamos que evalúes antes cuáles son las necesidades y las dificultades de tu actual Patronato/Junta.
Igual tienes demasiadas personas o demasiadas pocas. Pero igual es un problema de alineación de los miembros, de liderazgo, de reparto de tareas….
Al principio del post se hace mención a la diversidad, ¿qué nos podéis contar sobre esto?
¿Te suena la palabra diversidad?
¿Cuántas veces has oído o mencionado esta palabra últimamente? ¿Por qué la diversidad es un elemento clave en los Órganos de Gobiernos de las entidades sin ánimo de lucro?
Tener una Junta/Patronato divers@ aporta muchísimo valor a la entidad.
Proporciona una variedad de perspectivas, de experiencias, de contactos y de redes, que hace que la organización sea más fuerte y efectiva.
Además, la diversidad en el Órgano de Gobierno suele conducir a la diversidad a lo largo y ancho de la organización; desde personal hasta colaboradores y donantes, pasando por voluntarios, usuarios o proveedores.
Vale, pero…¿qué se entiende por diversidad?
Diversidad no significa contar con personas de distintas edades en la Junta o en el Patronato, es mucho más que eso.
La diversidad abarca diferentes ámbitos: género, religión, raza, edad, nivel socioeconómico, (dis)capacidad.
Consiste en crear una cultura de equidad e inclusión en la organización. Muchas entidades sin ánimo de lucro trabajan acorde a estos principios para promover el cambio.
La representación equitativa desafía los prejuicios e impide la discriminación. La inclusión permite dar la bienvenida a todas las personas, perspectivas y experiencias.
Así con diversidad, puedes conseguir una entidad más saludable, innovadora y funcional, que inspira y promueve la colaboración y genera empatía.
Entendido, entonces ¿qué más valor aportaría diversificar la Junta o el Patronato?
Veamos las ventajas que tiene la diversificación de la junta en tres dos bloques.
En primer lugar, una Junta/Patronato diverso multiplica la red de contactos de la organización. Si todos los miembros provienen del mismo contexto, la organización tiende a llegar siempre a los mismos círculos sociales y/o profesionales. Es posible además, que los contratados, voluntarios o donantes provengan también del mismo entorno y eso puede crear una suerte de atmósfera muy homogénea.
Contar con una red amplia es un pilar fundamental para la organización, no sólo para la recaudación de fondos, sino para establecer alianzas a medio y largo plazo.
La atmosfera homogénea mencionada anteriormente es perjudicial para la toma de decisiones. Piénsalo, ¿qué pasaría si todos los miembros del Patronato/Junta pensasen de la misma forma? ¿Qué os perderíais?
Gracias a la diversidad se obtienen puntos de vista diferentes que generan preguntas que amplían la perspectiva. Las conversaciones que se crean son más profundas lo que conlleva a decisiones más reflexivas.
¿Te ayudamos a construir un Patronato/Junto diverso, comprometido, profesional y con un tamaño adecuado?
Trabajemos juntos